La verdad es que esta es una de las especialidades de la industria cinematográfica estadounidense y en cada caso el objetivo se logra con mayor o menor éxito. La peor opción es la comedia “idiota”, para lo cual tienen actores expertos en hacer el papel de imbécil sin mucha dificultad: Ben Stiller, Adam Sandler, Jim Carrey, Brendan Fraser, etc.
Por otro lado, hay un tipo de comedia en que los actores intentan crear y desarrollar personajes que, aunque no sean muy interesantes, por lo menos tengan rasgos más humanos y vivan situaciones más creíbles; que tienen muchas más posibilidades de sacar alguna sonrisa a un espectador generoso.
En este último grupo entra “Comando Especial” (2012) dirigida por los estadounidenses Phil Lord, de 35 años, y Christopher Miller, de 36, que han desarrollado juntos toda su carrera de escritores, productores y últimamente en la dirección. Antes habían dirigido un largometraje de animación: “Lluvia de Albóndigas” (2009) y algunos capítulos en series de televisión.
Precisamente de ésta salieron los dos personajes protagónicos de “Comando Especial”, una pareja de policías recién titulados, que habían sido compañeros en la secundaria: Schmidt (Jonah Hill) y Jenko (Channing Tatum); y que, aparte de ser no ser muy brillantes, la inexperiencia les pasa la cuenta.
En su primera misión, son enviados encubiertos a una secundaria, para desbaratar una red de venta de una droga nueva, parecida al éxtasis, que ya mató a un joven. Schmidt, muy parecido a un nerd, lograr enamorar a una bella alumna, Molly (Brie Larson); y Jenko, un galán que nunca estudió, lograr aprender química y aprende el valor de la amistad. Las peripecias de la pareja resultan simpáticas, y eso basta para dejar lanzada la secuela, en la boca del capitán Dickson (Ice Cube), que al final les dice que su próxima misión clandestina será en una universidad.
Dejar una contestacion